Libra

Nuestra amiga Libra.

       A Libra ya la conocíamos desde hace muchos años, pero por motivos de amores había estado viviendo fuera los últimos 3 años, y no habíamos tenido contacto con ella, por lo que no sabía nada de nuestra vida swinger.

 Ella había vuelto, soltera, y por coincidencias laborales con #J, volvíamos a vernos a menudo. Libra es una chica de bajita, de nuestra estatura, con los ojos rasgados, muy sexy, con carita de muñeca, de pelito corto, algo que nos pone mucho, dejando el cuello descubierto... mmm... una chica con unas curvas de vértigo, con unos preciosos pechos redonditos,  y con pinta de ser deliciosos....

Habíamos hablado mucho entre #J y yo, sobre si contárselo, o no, no sabíamos cual sería su reacción, si nos retiraría la amistad por parecerle raritos, si le daría igual, o si le llamaría la atención creándole algún tipo de curiosidad. Esta ultima opción era la que mas nos apetecía, y la que veíamos mas improbable, pero nos apetecía tener a algún amig@ vertical que supiese lo nuestro, con quien poder... como mínimo hablarlo....

 Habíamos quedado con ella para ir a cenar a un restaurante de Barcelona, donde trabajaba de cocinero un chico al que ella estaba conociendo. Ella nos había pedido que la acompañásemos, ya que el chico estaría trabajando y no quería estar sola en una mesa. No creíamos que fuese un buen momento para contárselo, ya que el otro chico estaría apareciendo constantemente...

Llegamos al restaurante donde nos recibió él mismo, nos llevó a la mesa y nos sentamos, se sentaron las chicas juntas, y yo en el otro lado. La noche transcurría con normalidad pero en un ir y venir del chico con los platos, me dio un arrebato y...

-Estooo... #J y yo queríamos contarte algo...-

 #J me miró, sorprendida, ya que habíamos quedado que no era el momento, pero le pareció bien, o eso me hizo notar con un leve gesto de aprovación.

-Pues que #J yo somos swingers... liberales vaya, para que nos entiendas...

-Que qué????- dijo ella, mas que sorprendida…

 Empezamos a contárselo, como veíamos y entendíamos este mundillo, le contamos al tipo de sitios a los que habíamos ido, le contamos las cosas que hacíamos, por momentos teníamos que cambiar de tema, en momentos "clave", por la llegada del pretendiente, Libra mostraba cara de perplejidad y asombro, pero nunca de repulsión o algo parecido....

-Me habéis dejado pillada... No por este mundillo, que ya sabía que existía, más o menos, sino por vosotros... nunca lo hubiese imaginado de vosotros... jajaja...-

Ella se reía aun asimilando lo que le estábamos contando... Continuamos la conversación, seguíamos contándole cosas, y ella preguntando, cada vez más curiosa... Le dijimos que si quería la llevábamos a algún local para que lo viese y sintiese...

-Ahora estoy conociendo al chico este, pero no veo mucho futuro, si esto no va más allá, me tenéis que llevar a un sitio de esos con vosotros...

Así reaccionó ella, ante nuestra sorpresa, y a la vez excitación instantánea. En el tiempo que tarda en erizar la piel del cuello al ser besado por unos labios, pasaron por mi mente miles de imágenes de como seria realizar esa "fantasía original", que era para nosotros, realizar un trío con otra chica...

-Por supuesto que te llevaremos!!- le dije yo.

-Cuando tu quieras!!!- le dijo #J.

 Incluso la invitamos a la que iba a ser nuestra primera fiesta swinger, algo demasiado precipitado. Pero estaba decidida a acompañarnos, aunque por el momento no iba a ser...

Pasaron un par de meses, seguíamos viéndonos con ella, cabe decir, que desde aquella noche en la que le contamos nuestro secreto, la mirábamos de forma distinta, y suponemos que ella igual con nosotros. Tal y como ella predijo, su relación no iba a ir mucho más allá.

Como cualquier otra noche, la invitamos a cenar a casa, y nos comentó que cuando quisiésemos, la podíamos llevar a algún local Swinger, que ya había acabado con el chico, y tenía curiosidad por ver eso... Le dijimos que ella no estaba obligada a hacer nada que no quisiese, pero que acompañándonos a ese tipo de local ya sabía a lo que se exponía. Su respuesta fue contundente...

-Lo sé, pero yo quiero probar... si yo en algún momento veo que no quiero o no puedo seguir os lo haré saber.

Quisimos cerrarlo cuanto antes, ya que no queríamos dar tiempo de que se arrepintiese, o que apareciese otro pretendiente, y nos fastidiase la oportunidad de completar nuestra fantasía. Nos emplazamos para el siguiente fin de semana, a todos nos iba bien. El siguiente paso era elegir el local, nosotros solo conocíamos uno, quizás el más mítico de Barcelona, pero nos habían hablado muy bien de otros. Ella eligió el que ya conocíamos, quería ver eso de una piscina y un jacuzzi para hacer las cosas que se le antojen a uno.

Los días pasaban lentísimos, las ganas nos podían, esa semana fue muy activa, sexualmente, entre nosotros, y el tema que nos provocaba a ello, siempre era el mismo, el como sería... que cosas haríamos... hasta dónde llegaríamos... esas preguntas se nos contestaban en nuestras cabezas, con imágenes calientes, con situaciones morbosas, con sensaciones no vividas antes.
 Al fin llegó el día, todos reconocíamos estar nerviosos, pero ninguno decía nada sobre la excitación, que por lo que a nosotros nos concierne, lo estábamos, y mucho... En el trayecto al club, en el ambiente se respiraba nerviosismo, ya que era algo nuevo para los 3, aunque mas para ella. Llegamos al local, donde nosotros ya estamos socios, y ella entró como invitada nuestra. Nada más llegar, le dimos una vuelta por el local, mostrándole todas la habitaciones, y espacios que allí habían, las habitaciones están más o menos oscuras, de manera que cuando vienes de fuera, no ves demasiado, pero si que se oyen los gemidos, las respiraciones... y a todos se nos escapaba una sonrisilla, pensado en que quizás mAs tarde, fuésemos nosotros los que pusiésemos el sonido de ambiente....
 Una vez todo visto, nos fuimos a la disco, allí ya había gente de todo tipo, mas bien mayor que joven, y vestidos de cualquier manera, gente vestido normal, p sexy, o en lencería, o simplemente desnuda. Pedimos unas copas y le preguntábamos que tal le estaba pareciendo.

-Pues muy guay!! es extraña la sensación, pero mola! jejeje....

Todo iba por buen camino, ella se sentía cómoda, pero quedaba algo... algo que se nos antojaba difícil, somos de naturaleza tímida, además a ella la conocemos de toda la vida, como romper el hielo de forma sutil?? Si, bailando, pero ya estábamos bailando, y ninguna de nuestras manos, ni ninguna de nuestras bocas, se atrevía a ir un poco más allá....

-pero que pasa-pensaba yo... -si lo estamos deseando los 3!!!-

Algo tenía que hacer, pero que??? pues cómo quinceañeros!! me metí un cubito de hielo en la boca, y se lo pasé a #J, pasándole también el "marrón" de dar el paso "importante"...  pero lo hizo, y de forma muy sensual y sutil, la excitación aumentaba por momentos... y detrás de ella, Libra me lo pasó a mi, agarrándonos por cintura y cuello... el hielo empezó a pasar de boca en boca, por cada boca que pasaba, se reducía el tamaño del hielo, también se iba prolongando el tiempo de transición entre boca y boca, las lenguas empezaban a ganar espacio, y perder vergüenza.... las respiraciones se ítems oficiaban,  las manos también se iban deshaciendo de su timidez... escupí el hielo, y nos agrupamos en un triángulo de morbo, las lenguas iban y venían, mientras ellas se besaban, mi boca mordía sus cuellos, y mis manos recorrían los cuerpos aun vestidos de ellas...

Hicimos un parón, para pedir unas copas, salir a fumar, y volver a charlar sobre como estaba yendo la noche. Las sonrisillas de complicidad entre los tres era señal de que todo iba bien...

-Y ahora que? dónde vamos? que queréis hacer? - les pregunté

Ambas querían ir a la zona de aguas, y me parecía una genial decisión. Tras pasar por las taquillas, a desnudarnos, y ponernos el pareo y las chanclas, nos fuimos a la zona de agua, nos metimos en la piscina, y empezamos a jugar con una pelota de playa que allí había. Había más gente allí, y no precisamente jugando con la pelota... y con la escuda típica "vamos a ahogar a #R" volvió el contacto físico, esta vez sin ropa...

Empezamos a besarnos como en la disco, pero esta vez sin hielo, y sin timidez, las manos recorrían los cuerpos con total libertad, subí a Libra a la escalera de la piscina, y empecé a comerle su sexo, #J no cesaba de masturbarme a mi, y comerle los pechos a Libra, tras unos minutos así, invité a #J a seguir jugueteando con su conejito, a lo que accedió gustosamente... esa imagen nunca vista por mi me estaba excitando como nunca antes había estado, no podía dejar de mirarlas y de tocarlas, libra se bajó de las escaleras, y las chicas me pidieron que ahora me subiese yo... me regalaron la primera felacion,  a dos lenguas, de mi vida, tenerlas a las dos lamiendo mi sexo, masajeándolo, besándome y lamiéndome el pecho, los pezones... ahora era el momento de #J, Libra quería probar por primera vez el chochito de una mujer, baje de la escalera para que se pudiese poner #J y ahí se amorró nuestra amiga, quizás era la primera vez que se llevaba uno de esos a la boca, pero conocía bien como trabajarlo.... aproveche mientras ella se lo comía para penetrarla bajo el agua,  sentirlas a las dos gimiendo a la vez era algo que me hacia enloquecer, mi excitación era máxima, y así se lo demostraba, embistiéndola enérgicamente, hasta conseguir que se corriese, a continuación otro cambio, #J también quería sentirme dentro... Libra se quedo a un lado, relajándose en el jacuzzi, mientras nosotros acabábamos nuestra faena....

La experiencia fue sensacional, para repetirla... ahora nos encantaría prepárale a Libra una cenita con morbo en casa, poder disfrutarnos con la tranquilidad del hogar, eso si, sin piscina, ni jacuzzi...

Este relato va dedicado a Libra, que ella ya sabe quien es... ;) y que cuando quiera, y se den las circunstancias, lo repetimos, aunque después de la primera experiencia, seguro que la segunda seria aun mejor...  ;)  #BesosConLenguaS para nuestra querida Libra